Primeros. -- Segundos. -- Postres.

Disfrutar de la buena cocina también es un derecho para las personas diabéticas; sin embargo, no siempre es posible disponer de la suficiente imaginación para hacer una dieta variada y controlar, al mismo tiempo, los límites de la cantidad y calidad prescritos por el médico. Por ello, cocina para diabéticos, sin pretensión de ser una publicación médica, pero con estricto rigor, explica de manera sencilla que es la diabetes y ofrece pequeñas soluciones para las dudas de cada día. Incluye además una apetecible sección dedicada a las recetas, en la que es posible elegir entre una selección de primeros platos, segundos y postres excelentes, que, acompañados de pequeños trucos para mejorar el sabor y la presentación, conseguirán que en el momento de la comida sea un completo placer para los sentidos.